Luis Alberto Hernando y Maite Mayora, pódium de lujo para la primera edición
La I edición de la Carrera de Montaña de Mendaro resultó ser un éxito absoluto en todos los aspectos que rodearon a la prueba. Según los propios corredores, el recorrido estaba perfectamente señalizado y limpio. Los cinco avituallamientos fueron suficientes y estaban bien surtidos de líquido y alimento. La línea de llegada y la asistencia post-carrera también llamaron la atención de los atletas por lo bien organizado y ordenado que estaba. Además, el recorrido también estuvo a la altura y gustó a los corredores por las magníficas y espectaculares vistas que tenía en algunos de sus puntos y aunque para muchos de ellos resultó durísimo cubrir los 25 kilómetros, con 1.350 metros de desnivel acumulado, reconocieron que mereció la pena.
Buena climatología
Por si todo esto fuera poco, la climatología fue estupenda para la práctica deportiva y aunque hacia el final de la prueba el sol comenzó a calentar, les permitió cubrir gran parte de la prueba con unas temperaturas benignas.
En cuanto a la participación, se superaron las expectativas iniciales que apuntaban a que difícilmente se iba a llegar al medio centenar de participantes. Finalmente fueron 53 los atletas que participaron y exceptuando uno, todos los demás consiguieron acabar la prueba.
Este dato muestra el nivel de la participación, ya que no es muy usual una cifra tan baja de abandonos. Pero de todos estos participantes, el que brilló de sobremanera, por la facilidad con la que se impuso, fue Luis Alberto Hernando. Burgalés de nacimiento aunque residente en Jaca, es el actual campeón de la Copa de España y ganador de multitud de carreras, con récords de las pruebas incluidos, durante los últimos años. Como dato que avala su nivel está su participación en la prueba de Biatlón de los Juegos Olímpicos de invierno de Turín en el año 2006.
Menos de dos horas
Necesitó 1h57:18 en cubrir los 25 kilómetros del recorrido y vista la tranquilidad y el aspecto con el que llegó a meta, transmitió la sensación de no haber forzado en exceso. En segundo lugar entró el itziartarra Igon Manzisidor después de 1h:59.38. Fueron los dos únicos participantes que bajaron de las 2 horas, rompiendo así la barrera que muchos entendidos habían situado como inquebrantable.
Para completar el pódium llegó el hernaniarra Ibai Alba, que necesitó 2h:04.46. Alba fue el ganador de la carrera ciclista de juveniles del año 1999 y con su tercer puesto del domingo dio continuidad a su idilio con Mendaro y el pódium.
En cuanto a la categoría de la féminas, la mendarotarra Maite Mayora ganó con suma facilidad, ya que aventajó en 29 segundos a la segunda clasificada. Maite necesitó 2h:23.43 y acabó la carrera en un magnífico 17º puesto. Además no apuró mucho en las bajadas por miedo a posibles lesiones, que pudieran poner en peligro su participación el próxima edición de la Zegama-Aizkorri.
Los participantes mendarotarras también realizaron un buen papel. El primero de ellos fue Ion Revert, seguido de Juan Antonio Soto e Igor Rey. Acabaron la carrera en 6ª, 15ª y 19ª posición respectivamente.
También es de destacar la colaboración de la que ha gozado los miembros de Mendaroko Txirrindulari Elkartea a la hora de llevar adelante esta prueba.
Tanto los comercios que han donado sus productos, como los patrocinadores que han hecho su donación económica, como los caseríos por los que pasaba la carrera y los propios mendarotarras, que desde bien temprano estuvieron en el frontón Goñati preparando la logística del avituallamiento, han sido las claves del éxito de esta prueba que muy probablemente continuará en un futuro. Los miembros de MTE también quieren agradecer desde estas líneas su apoyo al evento e invitarles a que sigan así, trabajando por el bien de Mendaro.
Iturria: www.diariovasco.com – I. LAZKANO
